Untable de salmón en Mambo
Hacer Untable de salmón en Mambo es muy sencillo gracias a la receta que compartimos en esta entrada de cocinaenmambo
Origen de Untable de salmón en Mambo
Este tipo de untable de salmón tiene sus raíces en la cocina escandinava, donde el salmón ahumado es un ingrediente estrella en multitud de platos. En países como Suecia y Noruega, es común encontrar cremas para untar a base de pescado ahumado, combinadas con ingredientes como eneldo, pepinillos y alcaparras, que realzan su sabor. También es una receta popular en la gastronomía judía de Nueva York, donde el bagel con lox (salmón ahumado) y queso crema es un clásico.
Como hacer Untable de salmón en Mambo
150 gramos de queso crema.
75 gramos de salmón ahumado.
50 gramos de cebolla morada.
20 gramos de nueces.
20 gramos de pepinillo agridulce.
5 gramos de alcaparras.
Eneldo.
Instrucciones para hacer Untable de salmón en Mambo
Aquí va nuestra versión del untable de salmón en Mambo, un dip irresistible que nos sacará de apuros cuando queramos algo rápido, delicioso y con un toque sofisticado. Nos ponemos manos a la obra con nuestro fiel Mambo para que todo quede perfectamente integrado y con la textura ideal.
Lo primero es preparar los ingredientes. Cogemos la cebolla morada, las nueces, las alcaparras y el pepinillo agridulce y los metemos en el vaso del Mambo. No hace falta cortarlos demasiado antes, porque nuestra máquina se encargará de hacer el trabajo pesado. Con un par de toques a velocidad alta, conseguimos una mezcla bien picada, con pequeños trocitos que darán un extra de textura al untable.
Cuando ya tenemos todo bien triturado, llega el turno del queso crema. Lo añadimos al vaso y lo mezclamos con los ingredientes picados. Con solo unos segundos de movimiento, conseguimos una base cremosa, homogénea y llena de sabor. Aquí es donde empieza la magia: el queso suaviza y equilibra el toque ácido del pepinillo y las alcaparras, mientras que las nueces aportan un ligero crujiente.
El protagonista indiscutible de esta receta es el salmón ahumado. Lo troceamos en pedacitos y lo incorporamos a la mezcla con suavidad. No hace falta triturarlo demasiado, porque queremos que se sientan los trozos al untarlo. Damos una última vuelta en el Mambo, solo lo justo para integrar los sabores sin que se pierdan las texturas.
Ahora llega el momento de servir. Lo vertemos en un cuenco bonito, espolvoreamos un poco de eneldo por encima y listo. Es una auténtica delicia para untar en tostaditas crujientes, acompañar con palitos de verduras o incluso usarlo como relleno para sándwiches.
Este untable es un auténtico salvavidas para reuniones improvisadas o para cuando queremos darnos un capricho sin pasar horas en la cocina. Se prepara en pocos minutos y tiene una combinación de sabores espectacular. El ahumado del salmón, el punto ácido de las alcaparras y el pepinillo, la cremosidad del queso y el toque crujiente de las nueces hacen de este dip una opción que siempre sorprende.
Si lo dejamos reposar un rato en la nevera antes de servirlo, los sabores se integran aún más, y queda incluso mejor. Podemos hacer una buena cantidad y guardarlo en un recipiente hermético para disfrutarlo durante varios días.
Es un aperitivo elegante y fácil de hacer, perfecto para cenas especiales o simplemente para darnos un capricho cualquier día de la semana. Una receta sencilla, pero con un resultado espectacular que seguro repetiremos muchas veces.
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